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UN ESPAÑOL MATÓ A TROTSKY CON UN PIOLET

«Un español mató a Trotsky con un piolet 1”. A lo largo de mi infancia, mi madre me repitió esta frase más de una vez. “Se llamaba Ramón Mercader”. Yo imaginé siempre a un tipo vestido de escalador2 persiguiendo al soviético. Nunca le pregunté nada más. Muchos años después, la película Frida de la mexicana Salma Hayek me hizo recordar este hecho histórico. El asesinato tuvo lugar en 1940 en la Ciudad de México, después de vivir una temporada en casa de la pintora Frida KahloN y del pintor Diego RiveraN. Entonces, decidí ponerle cara al asesino.

Ramón Mercader nació en Barcelona en 1913; era un militante3 comunista y agente del servicio de seguridad soviético (NKVD). El español pertenecía a una familia burguesa4 de Barcelona: su padre era barcelonés y su madre era cubana. Casi todos los historiadores afirman que Caridad del Río puso en contacto a su hijo con el NKVD durante la guerra civil española; la cubana también participó en la misión que terminó con la vida de Trotsky: la operación Pato. Ramón Mercader entró en contacto con Trotsky por medio de Sylvia Ageloff, su novia. De hecho, se acercó a ella simplemente para entrar en contacto con Trotsky y ganarse su confianza. Un día, por fin, y según el plan establecido, Mercader consiguió estar a solas con el soviético. Entró en su casa y le clavó en la cabeza un piolet. Trotsky murió doce horas después. Tras el brutal asesinato a sangre fría, Ramón Mercader fue rápidamente detenido en la misma casa del soviético; su mamá, que esperaba fuera en un coche, consiguió escapar. 

El asesino español de Trotsky pasó veinte años en la cárcel mexicana de Lecumberri. Al salir de prisión se fue a vivir a la Unión Soviética y fue condecorado5 en secreto con la Orden de Lenin y la Medalla de Oro. Fue miembro de la KGB y llegó a ser coronel. Murió en La Habana en 1978, justo el año de mi nacimiento.

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* Texto publicado en el número 72 de la revista Punto y Coma

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